¿Deberías ver Cómo entrenar a tu dragón protagonizada por Mason Thomas y Gerard Butler? Descúbrelo en esta reseña.

¿De qué trata Cómo entrenar a tu dragón?

Un joven vikingo aspira a cazar dragones, pero se convierte inesperadamente en amigo de un joven dragón.

Clasificación: A
Duración: 126 minutos
Actores: Gerard Butler, Mason Thames, Nico Parker
Director: Dean DeBlois

Opinión de Cómo entrenar a tu dragón

En 2010, Cómo entrenar a tu dragón conquistó al público con su su historia conmovedora sobre la amistad y la aceptación. Ahora, quince años después, llega su versión live action, dirigida por el propio Dean DeBlois —responsable también de la trilogía animada— y protagonizada por Mason Thames como Hipo, en una adaptación que respeta profundamente el espíritu del material original.

Cortesía de Universal Pictures

A diferencia de otros remakes que se alejan de la esencia para modernizar o reinventar, esta nueva versión se siente auténtica y fiel. La historia nos sumerge nuevamente en el mundo vikingo de la isla de Berk.

Cortesía de Universal Pictures

Para quienes no vieron la película animada, el live action funciona perfectamente como una historia independiente. Seguimos a Hipo, un joven que ha crecido bajo la idea de que los dragones son enemigos mortales. Como hijo del imponente jefe Estoico (Gerard Butler), se espera que sea un cazador, pero su visión del mundo cambia radicalmente cuando se encuentra cara a cara con un dragón herido… y decide no matarlo.

Cortesía de Universal Pictures

Este encuentro con Chimuelo —un Furia Nocturna— marca el inicio de una amistad improbable y profundamente emotiva. Lo que comienza con desconfianza, evoluciona hacia un vínculo de respeto, complicidad y afecto. Ambos aprenden a conocerse y confiar, desafiando las creencias impuestas por sus respectivos mundos.

Cortesía de Universal Picutres

Además de ser visualmente llamativa, la cinta explora temas universales: la empatía frente al miedo, el cuestionamiento de la tradición, y la importancia de atreverse a cambiar el curso de lo establecido. Hipo demuestra que sí es posible transformar la relación entre humanos y dragones, si alguien se atreve a ver más allá del prejuicio.

Cortesía de Universal Pictures

También destaca la relación entre Hipo y su padre, marcada por el silencio y la incomunicación. No se entienden no porque no se quieran, sino porque no se escuchan. Pero a lo largo de la película, Estoico aprende a ver y aceptar a su hijo tal como es, reconociendo su valor no por su fuerza bruta, sino por su inteligencia y compasión.