No es broma, el PAN en Quintana Roo parece convencido de ser un Súper PAN capaz de desafiar en solitario al poderío guinda en 2027.

Una apuesta que, vista desde cualquier ángulo, se asemeja más a un acto de fe, ó un auténtico suicidio político.

Y es que Morena en Quintana Roo no sólo es dominante, es hegemónico, su  fuerza me recuerda al viejo PRI de los años 70, cuando la elección era apenas un trámite. Si la oposición pretende competir en 2027 o incluso en 2030, tendría que hacer lo que dicta la lógica electoral: construir una mega alianza, elegir un perfil con liderazgo real, arrastre social y coherencia entre discurso y trayectoria., pero encontrar a alguien así se ha vuelto casi un deporte extremo.

Aun así, el PAN por lo menos en nuestra entidad  decidió caminar hacia la contienda sin compañía. Así lo confirmaron en conferencia de prensa este martes la senadora Mayuli Martínez Simón, el dirigente municipal Jorge Pat y la dirigente estatal Reyna Tamayo Carballo. En palabras de Tamayo, el partido está en un proceso de “relanzamiento” y escuchando a una ciudadanía que, “según dicen”, les pide ir solos.

El argumento es curioso, sobre todo en un contexto donde el blanquiazul está más debilitado que nunca.

Basta ver que ya se perfila a la propia Mayuli Martínez como posible candidata a la gubernatura, lo que habla no de fortaleza, sino de un PAN sin cuadros frescos, sin renovación y sin capacidad de sorpresa. El partido está tan desdibujado que da la impresión de no haber aprendido nada de sus derrotas más recientes.

En resumen, el PAN en Quintana Roo dice que se está relanzando, tal vez, pero desde fuera, suena más a un salto al vacío que a un plan estratégico.

En un estado donde Morena crece y la oposición se atomiza, insistir en caminar solo no parece valentía: parece terquedad ¿no cree usted?

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