Hoteleros buscarían irse a Yucatán ante carga tributaria en Quintana Roo

El aumento en impuestos y nuevas cargas tributarias para el 2023 afectarán al sector hotelero.

Para algunos serán insostenibles y aquellos que aun tienen capacidad, proyectan irse a Yucatán. En los casos peores, dejar de operar, reconoció la presidenta de la Asociación de Hoteles en el Centro y Sur de Quintana Roo, Bertha Medina Núñez de Cáceres.

En el Paquete Fiscal 2023 se establece aumento del Impuesto sobre Nómina tres al cuatro por ciento, y al Hospedaje, del tres al cinco.

Además, al sector hotelero le adiciona dos derechos: saneamiento ambiental y peritaje y control de residuos sólidos, así como venta de bebidas alcohólicas en envase cerrado. Es ineludible el aumento al salario mínimo.

La presidenta de la Asociación de Hoteles del Centro y Sur de Quintana Roo solicitó al Gobierno del Estado y Poder Legislativo hacer ajustes.

Porque si bien la pandemia por COVID-19 está en fase de control, la economía aun no está fortalecida y las contribuciones pueden ser impagables.

Reconoció que el Gobierno del Estado busca mecanismos para generar recursos, sobre todo para rubros de desarrollo social y seguridad pública, pero la vía proyectada hacia el sector hotelero no es la adecuada.

El Impuesto al Hospedaje aumentará de tres a cinco, mientras que de Nómina, a cuatro. En la práctica el primero representa 66 por ciento de aumento y el segundo, 33.

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Si bien la contribución sería pagada directamente por los huéspedes, restará competitividad.

Aunque el Impuesto al Hospedaje no será pagado directamente por los empresarios, sino los huéspedes, restará competitividad. Pero el Impuesto Sobre Nómina será cubierto por los empleadores.

De aplicarse los impuestos como están planteados, generará aumento a las tarifas hoteleras y posiblemente, en despido de persona.

La oferta de cuartos en el Centro y Sur de Quintana Roo es de aproximadamente cuatro mil, y la ocupación promedio es de 30 por ciento.

Eso sin mencionar otras dos nuevas cargas fiscales: el impuesto del 4.5 por ciento por Venta Final de Bebidas Alcohólicas en Envase Cerrado y un derecho, por parte de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), de entre 17 y 27 mil pesos mensuales para aquellos centros de hospedaje que generen más de 27 kilogramos de basura al día.

Adicionalmente se pagarán 15 mil pesos a un perito certificado por la propia SEMA, para la revisión de la “libreta de la basura”, que es el registro y control de los residuos sólidos.

La preocupación aumenta toda vez que mensualmente desde el presente año se paga el Derecho de Saneamiento Ambiental que va desde los tres mil a 20 mil pesos mensuales.

No debe perderse de vista que el aumento de 20 por ciento al salario mínimo, que generará repercusiones financieras.

Por lo anterior existe un grupo al interior de la asociación que promueve el retiro de Quintana Roo para irse a Mérida, donde las condiciones fiscales son más flexibles.

En tanto, se elabora una contrapropuesta para exponer a la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), de Turismo (Sedetur) y Congreso del Estado, con el fin de hacer modificaciones al Paquete Fiscal 2023.

Porque si sus homólogos de la Zona Norte, donde hay circulación de capital, se oponen, en el Sur se rechaza, pues la situación es complicada.

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