Paradigmas.- La visita de Xóchitl Gálvez a Quintana Roo parece que despertó a muchos políticos de oposición que desde las elecciones locales del años pasado, hibernaban en sus cuevas o mantenían un bajo perfil desde sus cargos públicos.

Tal como los osos, hay políticos que necesitan de hibernar como un mecanismo de defensa para la supervivencia, sin embargo el estado de letargo en algunos ya preocupaba, y es que ante una nula oposición en Quintana Roo y falta de liderazgo no había motivos para despertar.

La llegada de Xóchitl Gálvez a Cancún y Playa del Carmen ayer lunes, provocó no sólo el despertar de varios que en su momento fueron protagonistas de la vida política, económica y social en la entidad, generó además un ánimo que no se palpaba hace tiempo en las esferas de la hoy llamada oposición.

Entre los que se vieron cercanos a la aspirante panista , estaban la diputada y ex candidata al gobierno de Quintana Roo, Laura Fernández Piña, el ex alcalde de Cancún y también por cierto ex candidato a la gubernatura , Juan Ignacio García Zalvidea , a Sara Latife Ruiz Chávez, quien fuera titular de Turismo en la entidad durante el sexenio de Félix González Canto , así como a Manuel Valencia Cardín y el ex mandatario Joaquín Hendricks Díaz, por citar algunos.

Precisamente de manera simultánea , mientras Xóchitl sostenía un encuentro ciudadano en Playa del Carmen, en la capital del país se anunciaba la retirada de Santiago Creel en el proceso, por lo que solamente competirá con Beatriz Paredes por la candidatura que a reserva de diversos factores , La hidalguense deberá ser la elegida.

No se si le alcance a Xóchitl para doblegar a la maquinaria morenista en 2024 , lo que si estoy convencido es que de ser la panista la candidata del Frente Amplio por México , podríamos decir esa frase sabatina del gran campeón del boxeo Julio César Chávez “hay tiro, hay tiro”., ¿no cree usted? , por lo menos ese es el ánimo de los políticos en Quintana Roo que acudieron al encuentro con Gálvez Ruiz.

Puedes ver: COLUMNA PARADIGMAS: SHEINBAUM Y GÁLVEZ, COINCIDENCIAS.